Accidentes por Comportamientos Riesgosos

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Accidentes Automovilísticos Causados por Comportamiento Riesgoso

Los accidentes automovilísticos causaron aproximadamente 38,800 muertes en los Estados Unidos el año más reciente, según el Consejo Nacional de Seguridad. Estos accidentes también provocaron más de 4 millones de lesiones graves.

El hecho es que la mayoría de los accidentes automovilísticos son prevenibles. La mayoría de los conductores entienden que comportamientos riesgosos, como conducir mientras se envían mensajes de texto o después de beber, están detrás de estos accidentes. Sin embargo, muchos conductores todavía se involucran en estos mismos comportamientos.

Para minimizar el daño y las pérdidas causadas por accidentes automovilísticos en nuestro país, es importante que los conductores comprendan el impacto del comportamiento de conducción riesgosa y cómo evitarlo al volante.

Mal Comportamiento al Volante

La gran mayoría de los accidentes automovilísticos en los EE. UU. son resultado del error humano. En otras palabras, estos accidentes podrían haberse prevenido si uno de los conductores involucrados no hubiera incurrido en un comportamiento riesgoso o descuidado.

Con conductores enviando mensajes de texto, realizando llamadas telefónicas, acelerando, conduciendo bajo la influencia y sintiéndose agotados al volante, las carreteras pueden volverse un lugar muy peligroso. A pesar de que la mayoría de los conductores son conscientes de los riesgos que estos comportamientos representan, todavía tienden a incurrir en uno o más de ellos. Por ejemplo, la principal causa de accidentes prevenibles – la conducción distraída – también es el riesgo más común asumido por los conductores, aunque se sabe que aumenta drásticamente la posibilidad de un accidente.

Esta tendencia se mantiene incluso para los conductores que han estado involucrados recientemente en un accidente. Un estudio de la AAA encontró que los conductores que habían estado en accidentes recientes también eran más propensos a reportar que habían incurrido en comportamientos de conducción riesgosos en el mes anterior a la realización de la encuesta.

Por ejemplo, el 43% de los encuestados que habían estado en un accidente admitieron haber enviado mensajes de texto mientras conducían en el mes anterior, en comparación con el 27% de los encuestados que no habían estado en un accidente reciente. Mientras tanto, el 96% de todos los encuestados dijeron que consideraban muy peligroso escribir o enviar mensajes de texto mientras conducían. Claramente, el comportamiento de los conductores no siempre coincide con sus creencias sobre la seguridad.

¿Por Qué los Conductores Todavía Incurren en Comportamientos Riesgosos?

Las estadísticas anteriores plantean la pregunta: ¿Por qué los conductores incurren en comportamientos riesgosos a pesar de conocer los peligros involucrados? La verdad es que no hay una sola respuesta a esta pregunta, pero hay algunas razones comunes por las que los conductores toman riesgos innecesarios al volante. Aquí hay algunas de ellas:

  • Mostrar destrezas: Algunos conductores gustan de mostrar su velocidad o habilidades de maniobra a otros autos en la carretera. Otros podrían estar presumiendo frente a los pasajeros en su auto. Este es un fenómeno particularmente común entre los conductores adolescentes, que tienden a intentar impresionar a sus amigos mientras dan paseos.
  • Ira al volante/frustración: La mayoría de los conductores están familiarizados con la sensación de ira al volante o frustración hacia otros en la carretera. Desafortunadamente, cuando estos sentimientos no se controlan, pueden llevar a comportamientos riesgosos como frenar bruscamente, cortar el paso a otros vehículos o acelerar repentinamente.
  • Sentirse apurado: Cuando alguien llega tarde a una reunión importante o a un plan con amigos, puede ser muy tentador conducir más rápido de lo seguro. Ya sea acelerando más de lo debido o apurándose para cruzar semáforos amarillos o incluso rojos, siempre representa un riesgo para la seguridad vial.
  • Sentirse invencible: Muchos conductores pueden sentirse invencibles cuando se ponen al volante. Puede ser difícil para los conductores imaginarse involucrados en un accidente automovilístico, especialmente si nunca han estado en uno antes. Este sentimiento de invencibilidad fomenta muchos comportamientos riesgosos.

Tipos de Comportamiento Riesgoso

Hay muchos tipos diferentes de comportamientos de conducción riesgosos. En general, estos comportamientos se pueden clasificar en conducción distraída, cansada, agresiva e incapacitada. Por ejemplo, enviar mensajes de texto mientras se conduce ejemplifica la conducción distraída, mientras que el exceso de velocidad es una forma de conducción agresiva.

Aprender a reconocer el comportamiento riesgoso en todas sus formas puede ayudar a los conductores a reconocer y cambiar sus propios hábitos peligrosos. Aquí hay una lista de algunos tipos específicos y prevalentes de comportamiento riesgoso al volante:

  • Exceso de velocidad
  • Leer o enviar mensajes de texto
  • Responder o hacer llamadas telefónicas
  • Conducir en estado de ebriedad
  • Conducir bajo la influencia de drogas (incluidas drogas recetadas que afectan los sentidos o el juicio)
  • Conducir fatigado
  • Pasar semáforos en rojo
  • Conducir demasiado cerca de otro vehículo
  • Cambios de carril repentinos
  • Frenar bruscamente delante de otro vehículo
  • Cortar el paso a otros vehículos
  • No ceder el paso

¿Cuál es el Comportamiento de Conducción Más Inseguro?

Conducir en estado de ebriedad es un comportamiento peligroso que contribuye a los accidentes y fatalidades en carretera. El nivel de alcohol en una persona se mide utilizando el peso del alcohol en un volumen específico de sangre, una medida llamada Concentración de Alcohol en Sangre (BAC).

Es ilegal en todos los estados, incluido Nuevo México, operar un vehículo con un BAC de 0.08 o superior, excepto en Utah, con un límite de BAC de 0.5. La ingesta de alcohol afecta la función del cerebro, lo que lleva a un deterioro del pensamiento, el razonamiento y la coordinación muscular.

Aquí están los efectos del alcohol que excede un BAC de 0.08:

  • Habla arrastrada
  • Mala coordinación
  • Pensamiento ralentizado
  • Evidente empeoramiento del tiempo de reacción
  • Capacidad reducida para mantener la posición en el carril
  • Frenadas inapropiadas

Estadísticas de Accidentes por Comportamiento de Conducción Inseguro en los Estados Unidos

Según la NHTSA, 37 personas mueren cada día en los Estados Unidos en accidentes de conducción en estado de ebriedad. En 2022, 13,524 personas murieron en accidentes de tráfico relacionados con la conducción en estado de ebriedad.

En Nuevo México, 129 personas murieron en accidentes relacionados con el alcohol en 2019. El alcohol está involucrado en el 40% de todos los accidentes de tráfico mortales en Nuevo México, lo que convierte a las fatalidades de tráfico relacionadas con el alcohol en el contribuyente más significativo a las muertes por tráfico en el estado.

Evite los Hábitos de Conducción Más Peligrosos

Conducción Distraída

En 2022, 3,308 personas murieron en incidentes de conducción distraída.

La conducción distraída es cualquier actividad que desvía la atención de conducir, incluyendo leer correos electrónicos, enviar mensajes de texto y conducir, hablar por teléfono o ajustar el sistema estéreo. Enviar mensajes de texto y conducir es una forma peligrosa de distracción.

Leer o enviar un mensaje de texto aparta la vista de la carretera durante 5 segundos. Si está conduciendo a 55 mph, 5 segundos de distracción es como conducir un campo de fútbol entero con los ojos cerrados.

Exceso de Velocidad

Conducir por encima del límite de velocidad considerado seguro para las condiciones específicas de la carretera es ilegal. 75 mph es el límite de velocidad aplicable en las autopistas. Conducir por encima del límite de velocidad prescrito pone en peligro a usted, a sus pasajeros y a otros usuarios de la carretera.

Además de exceder los límites prescritos, el exceso de velocidad incluye otros comportamientos, como conducir demasiado rápido para las condiciones de la carretera, como hielo, sitios de construcción o lluvia.

Los peligros del exceso de velocidad incluyen:

  • Tiempo de reacción reducido
  • Mayor potencial de pérdida de control
  • Mayor probabilidad de lesiones graves y daños sustanciales al vehículo
  • Posible fallo al ceder el paso, resultando en una colisión
  • Mayor probabilidad de accidentes por vuelco
  • Se requiere una mayor distancia para detener el vehículo

Conducir Demasiado Cerca

Conducir demasiado cerca de otro vehículo es un comportamiento peligroso que aumenta el riesgo de colisiones. Cuando el conductor trasero sigue demasiado cerca, tiene un tiempo de reacción limitado, lo que dificulta evitar colisiones en situaciones de emergencia.

Conducir demasiado cerca puede contribuir a una reacción en cadena de accidentes de tráfico. Un solo accidente causado por seguir demasiado cerca puede desencadenar una reacción en cadena de colisiones que involucren a múltiples vehículos.

No Usar las Señales de Giro

No usar las señales de giro es un error común que a menudo resulta en accidentes de tráfico. Si no usa una señal de giro, el otro conductor puede no reconocer su intención de girar a la izquierda o a la derecha, resultando en una situación que puede causar un accidente.

Los accidentes comunes asociados con no usar las señales de giro incluyen:

  • Accidentes al girar a la izquierda
  • Accidentes al girar a la derecha
  • Accidentes al cambiar de carril
  • Colisiones laterales

Seguridad Vial y Comportamiento de Conducción Riesgosa

Aquí hay algunos consejos para ayudar a minimizar los comportamientos riesgosos y promover la seguridad en las carreteras:

  • Mantenga el teléfono fuera de la vista. Si su teléfono está apagado, en modo avión o guardado de forma segura fuera de la vista, es mucho menos probable que se sienta tentado a usarlo. Muchos conductores toman sus teléfonos instintivamente cuando ven que ha llegado una llamada, mensaje de texto o correo electrónico. Para evitar esta reacción instintiva, mantenga su teléfono fuera de la vista y de la mente.
  • Conduzca sobrio. Es muy fácil juzgar erróneamente su capacidad para conducir después de una bebida o algunas bebidas. El alcohol afecta su juicio y lo hace más propenso a sentirse demasiado confiado en sus habilidades de conducción, incluso cuando es extremadamente peligroso que se ponga al volante. Siempre es mejor planificar para conducir sobrio o, si planea beber alcohol, organizar otro transporte para llevarlo a donde quiera que vaya.
  • Manténgase alerta. Siempre asegúrese de estar suficientemente energizado y alerta antes de salir a la carretera y tome descansos frecuentes una vez que esté en camino. Conducir de manera segura requiere que pueda reaccionar rápidamente a nuevas situaciones. Si se siente agotado y somnoliento mientras conduce por la carretera, es poco probable que mantenga esta capacidad. Es crucial hacer todo lo posible para mantenerse alerta y, si es necesario, saber cuándo detenerse para tomar un descanso.
  • No exceda el límite de velocidad. Todos hemos sentido la urgencia de acelerar mientras conducimos. Sin embargo, es importante resistir esta urgencia. Recuerde que el tiempo que puede ganar acelerando probablemente sea mínimo y ciertamente no vale el riesgo de causar un accidente a alta velocidad, potencialmente fatal.

Contacte a un Abogado de Accidentes Automovilísticos Ahora

Si ha estado involucrado en un accidente automovilístico causado por el comportamiento riesgoso de otra persona, puede tener derecho a una compensación. No dude en contactar a los abogados especializados en accidentes automovilísticos de Parnall Law para obtener asistencia con su caso. Incluso si no está seguro de si su situación amerita una acción legal, le brindaremos una experiencia profesional para ayudarle a determinar el mejor camino a seguir.

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Bertrand Russell Parnall

Bertrand Russell Parnall is an Albuquerque native, salutatorian of the Class of 1988 at Albuquerque High School, and co-captain of the district football champion Bulldogs. He earned his undergraduate degree from Rice University with a double major in history and French, and his law degree from the University of New Mexico School of Law after coming home to Albuquerque.

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